Los caminos libertarios del 68Rosa Albina Garavito ElíasPara nacer hay que romper un mundo, decía Hermann Hesse. El Movimiento estudiantil rompió el cascarón del viejo mundo de la posguerra heredado de sus padres. ¿Cómo fue que aquellos estudiantes se atrevieron a enfrentar al régimen de partido de Estado que existía en México, tan autoritario y represivo como el de la URSS y tan anticomunista como el de Estados Unidos? ¿Cómo fue que se atrevieron a desafiar la autoridad patriarcal que cohesionaba a las familias y a la sociedad? Con el tiempo, aquel ímpetu libertario se socializó hasta volverse trivial. Hoy parece nimio, pero la imperfecta libertad que vivimos fue una gran conquista que, además, resultó muy cara. Antes no era imperfecta, simplemente no existía.
La disputa por el poder virreinalFélix Calleja contra José de la Cruz durante la Guerra de Independencia en Nueva EspañaJoaquín E. Espinosa AguirreEl juego político desplegado por las autoridades virreinales de Nueva España para hacer frente a la rebelión insurgente iniciada en 1810 implicó acaloradas controversias entre los principales dirigentes del gobierno. Ello se vio en el enfrentamiento que sostuvieron los generales Félix María Calleja del Rey y José de la Cruz en 1811, el cual se agravó cuando el primero asumió el cargo de virrey en 1813. Las desavenencias se atizaron por la personalidad y el ego de cada uno, que no congeniaron desde que se conocieron. Los problemas tras el nombramiento de Agustín de Iturbide como comandante de Guanajuato significaron un episodio más de su larga disputa por el poder novohispano.
La sabrosa historia del antojito mexicanoMaría de los Ángeles MagañaLa palabra antojito nos remonta a la idea de un alimento popular consumido por la mayoría de los mexicanos. Por su rica variedad, existen diferentes elementos que lo caracterizan y definen: puede ser basado en maíz, masa y harina, aunque otros opinan que es de preparación rápida, ricos en grasas y de bajo costo; algunos más afirman que debe llevar frijol y chile. Lo cierto es que deriva del término antojo, que significa “deseo apremiante y pasajero, habitualmente caprichoso”; es de estilo callejero o consumido en un establecimiento pequeño y, por supuesto, se come de forma gustosa.
De valedores y tiros en las fiestas mexicanasMinucias de la lengua que perduranMarco VillaOrigen y permanencia centenaria de algunos términos que bien vale la pena traer a cuento en el marco de las celebración de septiembre, en la que millones de familias, con sus pequeñas o grandes pipioleras (plural del nahuatlismo pipiolo o pipiola, niñito o niñita), comen y pistean (derivada de pistar y esta a su vez de pisto, que es el jugo extraído de la carne de ave que se da caliente a un enfermo que solo puede ingerir líquidos) en las llamadas fiestas patrias.
El popular cricketUn deporte de élites y de obreros en el PorfiriatoCraig WhiteEl cricket llegó a México muchos años antes que el beisbol, el futbol y el boxeo. Actualmente, pese a que no muchos lo conocen, aún se practica en el país y tiene miles de fieles seguidores que saben que en la cancha no solo enfrentan a su rival, sino a toda la historia que este juego tiene detrás.
Jack London: revolucionario y ladrón de gallinasRicardo Lugo ViñasLa mañana del 19 de agosto de 1911, los lectores de la revista semanal estadounidense Saturday Evening Post recibieron la primera entrega del cuento largo –o novela corta– El Mexicano, firmado por el connotado escritor californiano Jack London, autor de la popular novela Colmillo Blanco.
1521 en México y en el mundoLuis A. SalmerónEl 13 de agosto de 1521, los ruinosos restos de la gran Tenochtitlan y su ciudad hermana Texcoco eran mudos testigos de las palabras que, según la tradición, Cuauhtémoc, el último tlatoani mexica, pronunció ante su captor Hernán Cortés: “Señor, ya he hecho lo que soy obligado en defensa de mi ciudad y mis vasallos y no puedo más, y pues vengo por fuerza y preso ante tu persona y poder, toma ese puñal que tienes en el cinturón y mátame luego con él”.
La herencia de Silvio ZavalaSus aportes a la historia de la América Colonial y de Nueva EspañaRodrigo Martínez Baracs“La [historiografía] anterior era modesta. Pensaba que el pasado es un campo muy grande, muy difícil, en el que apenas podemos encontrar algunas verdades, y era una actitud básica de esa historiografía. La actual, lo voy a decir en español, me parece ‘petulante’. Sabe y dicta todo. Es muy abundante. Le regala al pasado sus modelos, sus ideas, su lenguaje gremial, y yo considero esto equivocado. Me gusta más la posición anterior”. Silvio Zavala.